Madrid, 27 de agosto de 2012
El Gobierno de España quiere manifestar su profunda consternación y condena ante la matanza de centenares de personas en la localidad de Daraya en las inmediaciones de Damasco, en lo que parece una nueva escalada de la violencia por parte del régimen de Bashar el Assad contra su propia población, incluidos mujeres y niños.
El Gobierno hace un llamamiento a la realización de una investigación independiente sobre lo sucedido que contribuya a la delimitación, por los organismos internacionales competentes, de las responsabilidades de aquellos culpables de estos graves hechos.
Con el fin de detener la imparable escalada de atrocidades en Siria, el Gobierno de España considera urgente redoblar los esfuerzos de la comunidad internacional y, de manera especial en el seno del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que permitan vislumbrar una salida a la actual situación.