España condena en los términos más rotundos el asesinato hoy de cuarenta y cinco personas que viajaban en un autobús en las proximidades del barrio de Safoora Chowk, en la ciudad de Karachi, provincia de Sindh, Pakistán, donde residen mayoritariamente miembros de la comunidad ismaelita. La autoría de este ataque terrorista ha sido ya reclamada por el grupo “Jundullah”, una escisión de los taliban pakistaníes.
El gobierno de España traslada sus profundas condolencias a los familiares de las víctimas y hace votos por el restablecimiento de los heridos pronto y total.
El gobierno reitera al gobierno pakistaní su plena solidaridad y apoyo en la lucha contra el terrorismo.