El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ignacio Ybáñez Rubio, participó ayer en los actos que la Embajada de España en Sofía y las autoridades búlgaras organizaron en homenaje al diplomático español Julio Palencia. Palencia estuvo destinado en Bulgaria entre 1940 y 1943. Desde su puesto en la Embajada de España, extendió pasaportes apoyándose en el Decreto de concesión de nacionalidad española a los Sefardíes de 1924, custodió bienes y amplió su auxilio a los judíos hasta el punto de adoptar incluso a los hermanos Renato y Claudio Arié, cuyo padre y cuyo tío fueron ejecutados en aplicación de las leyes raciales. En represalia por sus acciones a favor de los judíos, Palencia fue declarado "persona non grata" por el gobierno de Bogdan Filov, lo que supuso su cese y regreso a Madrid.
Los actos de homenaje, organizados por la Embajada de España en colaboración con el Ministerio de Asuntos Exteriores de Bulgaria y el Ayuntamiento de Sofía, consistieron en la inauguración de un mural realizado por el artista español Okuda en el Instituto Bilingüe Miguel de Cervantes, y el descubrimiento de una placa conmemorativa en el jardín de la ciudad de Sofía que a partir de ahora llevará el nombre de Julio Palencia. Junto al secretario de Estado y a las autoridades búlgaras, participaron en este homenaje representantes de la asociación Shalom, que agrupa a la comunidad judía búlgara, así como de la Red de Juderías española, del Centro Sefarad-Israel, y familiares de los hermanos adoptados por Julio Palencia
Para el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación es una satisfacción que se reconozca la labor realizada por muchos miembros de la Carrera Diplomática española que, arriesgando sus vidas y puestos de trabajo, salvaron de la muerte a miles de judíos. La reciente exposición “Más allá del deber. La respuesta humanitaria del Servicio Exterior frente al Holocausto”, organizada por el Ministerio para rendir homenaje a dichos funcionarios, se ha expuesto en la Embajada de España en Sofía, coincidiendo con la celebración de estos actos.
El Gobierno español se suma a tantos otros en la consideración de que la memoria y el recuerdo son la mejor de las herramientas para honrar a las víctimas del Holocausto, educar contra la barbarie y combatir el antisemitismo. Por ello, participa en los actos internacionales de reconocimiento; promueve la celebración institucional del día internacional en Memoria del Holocausto que tiene lugar cada 27 de enero; es miembro desde 2008 de la organización “Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto” (IHRA) y tiene un acuerdo de colaboración, a través del Centro Sefarad-Israel, con Yad Vashem.