España da la bienvenida al acuerdo de alto el fuego que han firmado hoy el gobierno de Myanmar y ocho grupos armados étnicos, después de dos años de negociaciones, y confía en que aquellos grupos que aún no se han adherido al mismo lo hagan en un próximo futuro.
Este acuerdo representa un hito de la mayor importancia en el proceso de normalización democrática del país.