España, a través del Ministerio de Exteriores, asumirá la copresidencia de la Coalición por la Igualdad de Derechos, la principal alianza internacional público-privada, formada por 45 Estados y organizaciones de la sociedad civil, de defensa y promoción de los derechos de las personas LGBTI en todo el mundo. La decisión se ha tomado en la conferencia ministerial bienal de la Coalición, reunida hoy y mañana en Berlín, y dará a nuestro país, junto con Colombia, la copresidencia por un periodo de dos años, que arranca el próximo 1 de enero.
Para España, la promoción de los derechos humanos y, en particular, la defensa de la igualdad y la dignidad de las personas LGBTI no es solo una prioridad de política exterior, sino un compromiso ético que emana de nuestra historia y de los valores que compartimos como sociedad. Por esta razón, el Gobierno español asume este reto consciente de los enormes retos que supone la lucha por los derechos de las personas LGBTI.
Firme compromiso
A pesar de los avances en muchos países, aún 64 Estados castigan las relaciones entre personas del mismo sexo, y en varios de ellos con penas extremas, incluida la pena de muerte. A esto se suman los discursos de odio, sobre todo en las redes sociales, la violencia y la discriminación que siguen amenazando la vida y la dignidad de muchísimas personas en todo el mundo por razón de su orientación sexual o su identidad de género.
Desde España se asume la copresidencia con el firme compromiso de fortalecer esta plataforma única y de trabajar sin descanso en favor de la despenalización de las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo. Se impulsarán iniciativas diplomáticas para que cada vez sean menos los países que cuenten con estas leyes injustas y anacrónicas. Y se cooperará con organizaciones internacionales, como las Naciones Unidas y la Unión Europea, para garantizar que la despenalización sea un tema central en las agendas globales de derechos humanos.
España agradece a Alemania y a México la labor realizada como copresidencias y confía en que, con la colaboración de Colombia y el apoyo de todos los miembros, la Coalición se consolide no solo como un símbolo de esperanza, sino también como una herramienta efectiva de cambio. Porque el mundo que soñamos no es un ideal lejano, es una meta alcanzable si trabajamos unidos, guiados por los valores de la igualdad, la justicia y la dignidad de todos los seres humanos.