Los ministros de Asuntos Exteriores y Expatriados de Jordania y de Cooperación al Desarrollo de Suecia han presidido hoy la Conferencia de Donantes de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Medio (UNRWA), que se ha celebrado de manera telemática.
Durante la misma, se ha analizado el momento delicado para UNRWA por el impacto de la COVID-19 en la situación de crisis sanitaria crónica de los refugiados palestinos, así como por la tensión política derivada de la posible anexión por parte de Israel de partes de Cisjordania y por las dificultades presupuestarias tras la retirada como donante de Estados Unidos en 2018.
UNRWA nació en 1949 bajo el mandato de la Asamblea General de Naciones Unidas para ofrecer ayuda de emergencia y programas de asistencia social a la población palestina refugiada.
Tras más de 70 años, la actual misión de UNRWA ofrece asistencia y protección a los 5.6 millones de refugiados palestinos que habitan en 58 campamentos de Jordania, Siria, Líbano y Palestina a la espera de una solución a su estatus.
Concebida es sus orígenes como una organización temporal, UNRWA ha adaptado sus programas para cubrir las cambiantes necesidades de los refugiados durante las últimas décadas. Actualmente, UNRWA gestiona más de 700 escuelas a las que asisten medio millón de alumnos en todo Oriente Medio.
La Agencia presta también atención sanitaria en 143 centros de salud primaria y gestiona 49 centros sociales y de formación para mujeres, además de otros tantos centros de servicios comunitarios. El actual mandato de UNRWA ha sido renovado hasta junio de 2023.
Por parte de España ha participado la Secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Ángeles Moreno Bau, quien ha subrayado el papel vital que juega UNRWA en el cuidado y protección de la población refugiada. Esta conferencia coincide con su viaje virtual a Palestina esta semana.
Durante su intervención, Moreno Bau ha recordado el compromiso de España con la consecución de una paz justa y duradera al conflicto israelí-palestino, con pleno respeto al derecho internacional, en el convencimiento de que no hay más alternativa que una solución de dos estados con Jerusalén como capital de ambos.
España es uno de los donantes históricos más comprometidos con UNRWA y figura entre los primeros veinte donantes mundiales.