El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), junto al de Exteriores, Unión Europea y Cooperación, han facilitado el relevo en Seychelles de cerca de 200 marineros españoles que se encontraban embarcados en buques españoles que faenan en el Océano Indico. Esta tripulación, que debía ser relevada por nuevos tripulantes, ha tenido que prolongar en un mes su periodo normal de actividad de cuatro meses, debido a las restricciones a la libre circulación de personas impuestas en Seychelles como consecuencia de la pandemia de la COVID-19.
La principal zona de captura de atunes para la flota española se encuentra en los caladeros del Océano Índico. Los 15 buques congeladores españoles que faenan en estas aguas han continuado su operativa con normalidad tras la declaración del estado de alarma, pero las tripulaciones necesitan los relevos correspondientes.
Los dos ministerios han trabajado estrechamente con los armadores para facilitar las gestiones y los permisos correspondientes para que un vuelo chárter pudiese aterrizar en Puerto Victoria con 189 marineros españoles que han relevado a otros tantos compatriotas que llevaban más de un mes sin poder regresar a España y que anoche aterrizaron en Madrid.
La flota atunera de larga distancia solicitó el apoyo a la Secretaría General de Pesca para poder realizar el relevo de las tripulaciones de los buques que operan en el Índico. El relevo se realiza habitualmente en Seychelles.
Al inicio de la pandemia, Seychelles, pese a contar con solo 11 casos de COVID-19, decretó el toque de queda en todo el país. Esa situación impactó directamente a los armadores europeos debido a que la Unión Europea tiene con ese país uno de los acuerdos pesqueros más importantes por el que faenan 20 buques comunitarios, de los que 15 son atuneros españoles.
Esos armadores tienen desplegados en el Índico, de forma permanente, en torno a unos 500 pescadores cuyo relevo se produce aproximadamente cada cuatro meses. El toque de queda sorprendió a muchos de ellos a punto de ese relevo, por lo que, hasta la fecha, la mayor parte de los marineros superaran los cinco meses en la zona.
La República de Seychelles comenzó el 4 de mayo un plan de desescalada. La Embajada de España, en coordinación con la Secretaría General de Pesca del MAPA, acompañó en los contactos a las asociaciones de armadores con las autoridades de Seychelles para favorecer el relevo y el posterior retorno de las tripulaciones españolas y francesas.
Las gestiones realizadas por el Gobierno facilitaron que ayer domingo, un vuelo chárter fletado por los propios armadores llegara a Puerto Victoria (Seychelles) con 189 nuevos pescadores, con el test COVID-19 realizado. Nada más llegar fueron trasladados en autobuses desde el aeropuerto hasta el puerto pesquero para embarcar directamente en los buques y permanecer a bordo entre 14 y 21 días sin tocar tierra y, por tanto, sin entrar en contacto con la población del país. En ese mismo vuelo, retornaron desde Puerto Victoria otros tantos marineros españoles que llegaron a Madrid ayer, a última hora de la noche.