El Gobierno de España expresa su condena por las últimas medidas legislativas emprendidas en algunos países que limitan la libertad de expresión y la igualdad de las personas.
España es firme defensora de la no discriminación por cualquier motivo, incluyendo la orientación sexual, que es una circunstancia que pertenece a la esfera más íntima de cada individuo.
España reafirma su compromiso con los derechos humanos y libertades fundamentales y defiende el respeto del estado de derecho como mecanismo de garantía para todas las personas, sin distinción alguna.