Ayer se celebró en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York una reunión de alto nivel en el marco de la iniciativa hispano-marroquí de Mediación en el Mediterráneo (Med/Med). La reunión fue presidida por el Secretario de Estado para Asuntos Exteriores de España, Gonzalo de Benito, y por el Representante Permanente de Marruecos ante NNUU, Embajador Omar Hilale, y moderada por el Representante Permanente de España ante NNUU, Embajador Román Oyarzun. Contó además con la participación del Secretario General Adjunto de NNUU, Jeffrey Feltman, y numerosos Embajadores acreditados ante la Organización.
La reunión de Mediación en el Mediterráneo se abrió por vez primera al Grupo de Amigos de la Mediación y contó con la activa participación de representantes de cincuenta países, de Naciones Unidas, de otras organizaciones internacionales y del International Peace Institute.
En esta reunión se pasó revista a los resultados de las Conferencias Regionales de Madrid (2013), Rabat (2013) y Brdo-Eslovenia (2014), y se presentaron dos documentos desarrollados en el marco de la iniciativa: la “Lista de Actores en Mediación” y el estudio sobre “Tipología de Conflictos de la Región Mediterránea”, que serán objeto de una exposición más detallada en la próxima Conferencia Regional Med/Med que tendrá lugar a principios de 2015.
La reunión también sirvió para anunciar la cuarta y quinta conferencias regionales que se realizarán, respectivamente, en Jordania y Montenegro. El Secretario de Estado Gonzalo de Benito se hizo eco además en su intervención de dos nuevos compromisos en el marco de la iniciativa hispano-marroquí: el taller “Mujeres y Mediación” que tendrá lugar en Rabat los próximos días 20 a 23 de octubre; y la convocatoria en Madrid de una reunión con las NNUU y organizaciones regionales y subregionales con el fin de abordar la aplicación de la resolución 68/303 de la Asamblea General sobre mediación y organizaciones regionales.
El Secretario de Estado señaló en su intervención que el propósito de estos encuentros es llevar a la práctica de manera directa y eficaz los trabajos desarrollados hasta ahora en el marco de la iniciativa hispano-marroquí de modo que puedan contribuir a la prevención y solución de conflictos y, en definitiva, al mantenimiento de la paz y seguridad internacionales.