Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros para su funcionamiento, mantener la sesión y personalizar la experiencia del usuario. Más información en nuestra política de Cookies

Menu

NOTA DE PRENSA 139

España interviene en el Comité de Descolonización de Naciones Unidas: Gibraltar

14 de juny de 2016
España participó el pasado 13 de junio en la reunión del Comité de Descolonización de Naciones Unidas (conocido también como “Comité de los 24”), celebrada en Nueva York.

La representante española en dicha reunión subrayó el compromiso y el respaldo de España con la labor que viene realizando el “Comité de los 24”, fundamental para acabar con el colonialismo y para aplicar las medidas conducentes a lograr los objetivos del Tercer Decenio Internacional para la Erradicación del Colonialismo 2011-2020 y en particular a poner fin a la situación colonial anacrónica que España sigue sufriendo en pleno Siglo XXI.

Esta Organización ha reconocido en numerosas ocasiones la especificidad del proceso descolonizador de Gibraltar, al señalar que la situación colonial de Gibraltar menoscaba la integridad territorial de España como queda patente en la Resolución 2353 (XXII), de 19 de diciembre de 1967, de la Asamblea General. Como destacó España, Naciones Unidas ha señalado con claridad que, en el proceso de descolonización de Gibraltar, el principio que debe regir no es el de libre determinación sino el de restitución de la integridad territorial española.

Recordó igualmente nuestra representante que la solución pasa por una restitución del territorio, tanto del cedido conforme al Tratado de Utrecht de 1713, como del que fue ocupado posteriormente, de forma ilegal, por el Reino Unido sin título alguno, en particular el Istmo y las aguas circundantes. En efecto, el Reino Unido se apropió de otros territorios no cedidos en el Tratado de Utrecht de 1713. Dicho Tratado define con total claridad cuáles son los espacios cedidos al Reino Unido: sólo se cedieron la ciudad y el castillo de Gibraltar junto con su puerto (con su aguas interiores únicamente), defensas y fortalezas que le pertenecen. Las aguas que rodean Gibraltar nunca se cedieron por lo que permanecieron y permanecen bajo soberanía española.

La representante española en la reunión del Comité de Descolonización recordó, en cuanto al Istmo que separa el Peñón del resto de la Península Ibérica, que tampoco fue cedido en el Tratado de Utrecht. En el siglo XIX, España permitió al Reino Unido, por razones humanitarias, establecer campamentos provisionales para evitar el contagio de la población del Peñón, afectada por una epidemia de fiebre amarilla. La epidemia pasó, pero a pesar de las protestas españolas, esos asentamientos en suelo español se convirtieron en permanentes. En 1909 el Reino Unido construía una Verja, acotando la zona e intentando consolidar así la ocupación ilegal de territorio español.

España se refirió asimismo a que la Asamblea General de Naciones Unidas, desde hace cuatro décadas, viene instando a la Potencia administradora y a España a que resuelvan todas sus diferencias en torno a esta cuestión. Las Naciones Unidas proponen, así, una solución negociada bilateralmente entre España y el Reino Unido. Año tras año, una Decisión, adoptada por consenso por la Asamblea General, viene recogiendo este mandato de diálogo bilateral. La misma señala también el marco en el que debe producirse dicha solución negociada, es decir, el de la Declaración hispano-británica realizada en Bruselas el 27 de noviembre de 1984 y que dio lugar unos meses más tarde al denominado Proceso de Bruselas.

Contrariamente al mandato de las Naciones Unidas, y al compromiso adquirido por el propio Reino Unido en la Declaración de Bruselas de 1984, esas negociaciones hace ya años que no se están produciendo. La responsabilidad de este incumplimiento recae enteramente en la Potencia administradora que desde hace ya demasiados años viene negándose incluso a dialogar con España sobre el futuro de Gibraltar.

La representante española en la reunión del Comité de Descolonización recordó que lo que pide nuestro país es el cumplimiento cabal de lo que Naciones Unidas ha dispuesto: entablar negociaciones con el Reino Unido en las que se tendrán en cuenta los intereses de la población del Territorio. Recordó igualmente que España ha trasladado este mensaje de disposición al diálogo y a la negociación una y otra vez a las autoridades del Reino Unido, a los más altos niveles, a pesar de que las dificultades de España con esta colonia no cesan, a causa de la actitud a menudo unilateral e irresponsable de las autoridades locales gibraltareñas.

En relación con esas dificultades que se dan de manera diaria, la representante española se refirió en particular a los ámbitos pesquero, fiscal y a ciertos tráficos ilícitos.

Así, en el ámbito pesquero, las autoridades locales de Gibraltar han hecho todo lo posible para que los pescadores españoles que venían faenando en las aguas españolas desde fechas inmemoriales dejen de pescar. En este sentido, en julio de 2013, para impedir de facto a los pescadores faenar, arrojaron cerca de setenta bloques de hormigón en la Bahía de Algeciras, en aguas que España considera como propias y que servían de caladero tradicional a los pescadores españoles.

Además, la colonia sigue manteniendo un régimen fiscal y financiero de naturaleza opaca y discriminatoria. Es bien conocido que Gibraltar es un paraíso fiscal y como tal es un obstáculo para los esfuerzos de la comunidad internacional de lucha contra la evasión fiscal y el blanqueo de capitales.

En cuanto a los tráficos ilícitos,  España constata que, desgraciadamente, las autoridades locales gibraltareñas, más allá de meras declaraciones retóricas, no están cooperando debidamente, siendo el ejemplo más evidente el contrabando de tabaco, que se ha convertido en un grave problema: entre 2010 y 2012 las aprehensiones de cajetillas de cigarrillos aumentaron en un 213%. Ante esta situación y la pasividad de las autoridades gibraltareñas, España mejoró la eficacia de los controles en la Verja, produciéndose un inmediato descenso del contrabando procedente de Gibraltar, que se ha conseguido reducir en casi un 30% con respecto a 2014.

En definitiva, todos estos problemas generados en Gibraltar están causando inconvenientes a los ciudadanos tanto en Gibraltar, como en el Campo de Gibraltar y ha acentuado todavía más, si cabe, la urgencia de poner fin a esta situación colonial.

A pesar de ello, la representante española reiteró la buena voluntad de España a la hora de desarrollar una cooperación de carácter regional que redunde en beneficio de los habitantes del Campo de Gibraltar y de Gibraltar. Dicha cooperación regional debe dejar a un lado las cuestiones de soberanía y de jurisdicción, que corresponden exclusivamente a España y al Reino Unido, tal y como requiere la doctrina de las Naciones Unidas.

España impulsó el Foro de Diálogo sobre Gibraltar en 2004, como una iniciativa dirigida a favorecer la cooperación en beneficio de los ciudadanos del Campo de Gibraltar y de Gibraltar. Pero el Foro quedó bloqueado en 2010 como consecuencia de la insistencia por parte de las autoridades locales de Gibraltar en utilizar las conversaciones sobre aspectos técnicos y cooperación local para avanzar en sus pretensiones en materia de soberanía.

Por ello, en línea con lo dispuesto en la última Decisión de Consenso sobre Gibraltar aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas de diciembre de 2015, estamos tratando de llegar desde hace años a un acuerdo con el Reino Unido sobre la puesta en marcha de un nuevo esquema de cooperación regional centrado únicamente en cuestiones que atañen directamente a la cooperación entre los habitantes de uno y otro lado de la Verja. Este nuevo esquema contempla la participación, además de España y del Reino Unido, de las autoridades locales gibraltareñas y – a diferencia del ya desaparecido “Foro Trilateral”- también de las autoridades locales y regionales españolas competentes.