España condena firmemente los dos ataques terroristas perpetrados hoy en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, en el noroeste de Pakistán. El primero, contra un vecindario cristiano en la localidad de Warsak, ha sido repelido por las fuerzas de seguridad. El segundo, en la sede del tribunal de justicia de la ciudad de Mardán, ha causado al menos una docena de muertes y un gran número de heridos.
El gobierno de España se duele con los familiares y allegados de las víctimas y desea a los heridos el restablecimiento más rápido y completo que sea posible.
El gobierno aprecia el compromiso de las autoridades paquistaníes con la protección de la seguridad e integridad física de los miembros de minorías religiosas, del que es muestra la acción eficaz de las fuerzas de seguridad hoy en Warsak, y reitera su llamamiento al gobierno de Pakistán para que continúe y profundice la defensa de los derechos humanos de todos, incluidas las personas que practican religiones minoritarias en Pakistán.