El Gobierno ha adoptado todas las medidas de protección de los locales del Consulado General de Marruecos en Las Palmas para evitar que hechos similares a los que ocurrieron el pasado jueves día 4 se vuelvan a producir.
Con independencia del pleno respeto de los derechos de libre expresión y de manifestación, el gobierno rechaza unos hechos que son absolutamente reprobables y tomará todas las medidas necesarias para asegurar la inviolabilidad de las sedes de misiones diplomáticas y consulares.