España condena en los términos más enérgicos el linchamiento de un matrimonio pakistaní de religión cristiana el pasado día 4 en la localidad de Kot Radha Kishan (provincia del Punjab) a manos de una multitud que los acusaba del delito de blasfemia e insta a las autoridades de Pakistán a tomar todas las medidas necesarias para llevar ante la justicia a la mayor brevedad posible a los responsables de este cobarde acto de violencia que, además de truncar dos vidas humanas, tiende a profundizar las divisiones por motivos religiosos entre las distintas comunidades de Pakistán.
España seguirá insistiendo ante las autoridades de Pakistán para que se garantice el respeto de los derechos de las personas pertenecientes a minorías religiosas, una cuestión que forma parte permanente del diálogo bilateral que mantiene con dicho país, igual que hace la Unión Europea en su conjunto.