La Carta de la Organización de las Naciones Unidas define en sus Principios Generales las atribuciones de la Organización en el desarme, y confiere a la Asamblea General competencias en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, incluidos el desarme y el control de armamentos.
En su Art. 26 el principio del establecimiento y mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales con la menor desviación posible de recursos humanos y económicos del mundo hacia los armamentos atribuye al Consejo de Seguridad la competencia para elaborar planes para el establecimiento de un sistema de regulación de armamentos.
La resolución nº 1, adoptada el 24 de enero de 1946, dio lugar en Asamblea General a la Comisión para la Energía Atómica, compuesta por los Estados miembros del Consejo de Seguridad y Canadá, para eliminar mediante propuestas concretas los arsenales nucleares y las armas de destrucción masiva.
La Comisión para el Desarme sustituye en 1952 a las dos anteriores con idéntica composición, y en 1961 a iniciativa de EEUU y la Unión Soviética se crea el Comité de Desarme de las Diez Naciones, considerado como primer precursor de la Conferencia de Desarme, de carácter restringido y con objeto de asistir a la Asamblea General de NNUU y la Comisión de Desarme para lograr consensos con que avanzar en la agenda de desarme.
A finales de ese mismo año, la Resolución 1722 cambió su denominación por la de Comité de los Dieciocho para el Desarme compuesto por Brasil, Bulgaria, Birmania, Canadá, Checoslovaquia, EE.UU., Etiopía, Francia, India, Italia, México, Nigeria, Polonia, Rumanía, Reino Unido, República Árabe Unida, Suecia y la URSS, y que se reuniría por primera vez en Ginebra en marzo de 1962.
El Comité, que en 1969 pasó a denominarse Conferencia del Comité del Desarme (junto con Argentina , Hungría, Japón, Marruecos, Mongolia, Países Bajos, Pakistán y Yugoslavia), volvió a ampliarse en 1975 (con las dos Alemanias, Irán, Perú y Zaire), y tras largas negociaciones aprobó diversos Tratados además de desempeñar un destacado papel en la conclusión de otros 4 acuerdos multilaterales:
- Tratado sobre la no-proliferación de armas nucleares (TNP,1968).
- Tratado para la prohibición del emplazamiento de armas nucleares y otras armas de destrucción masiva en los fondos oceánicos (1971).
- Convención sobre la prohibición de técnicas de modificación ambiental para usos militares u hostiles (1977).
- Convención sobre la prohibición del desarrollo, producción o almacenamiento de armas bacteriológicas y sobre su destrucción (BWC, 1972).
Ya como
Conferencia de Desarme (en inglés
UNODA), a partir de 1984 desarrolla y lleva a término con éxito dos importantes negociaciones:
La Conferencia de Desarme (CD), que desde marzo de 2017 es la competencia de Izumi Nakamitsu como Secretaria General Adjunta y Alta Representante, adoptó su denominación actual el 7 de febrero 1984, tras comenzar en 1978 la redefinición de las estructuras del desarme de las NN.UU en la Primera Sesión especial de la Asamblea General dedicada al Desarme, donde se decidió que quedase como el principal organismo deliberante de las NN.UU. en la materia, por lo que el Comité del Desarme de Ginebra (1979) pasó a ser el único organismo multilateral de negociación para las cuestiones de desarme.
Está compuesta en la actualidad por 65 miembros permanentes estructurados en 3 grupos (Occidental, Países No Alineados, Países de Europa del Este) en función de líneas geopolíticas históricas, sin pertenecer China a ninguno de ellos.
Argelia Francia Pakistán
Argentina Alemania Perú
Australia Hungría Polonia
Austria India Corea del Sur
Bangladés Indonesia Rumanía
Bielorrusia Irak Federación Rusa
Bélgica Irlanda Senegal
Brasil R.I.Irán Eslovaquia
Bulgaria Israel Sudáfrica
Camerún Italia España
Canadá Japón Sri Lanka
Chile Kazajistán Suecia
China Kenia Suiza
Colombia Malasia República Árabe Siria
Cuba México Túnez
Corea del Norte Mongolia Turquía
R.D. Congo Marruecos Ucrania
Ecuador Birmania Reino Unido
Egipto Países Bajos Estados Unidos de América
Etiopía Nueva Zelanda Venezuela
Finlandia Nigeria Vietnam
Noruega Zimbawe
La CD adopta su propio reglamento y es autónoma a la hora de establecer su propio orden del día, que decide al inicio de cada sesión anual, tomando en consideración las recomendaciones de la Asamblea General, a la cual informa cada año sobre el desarrollo de sus trabajos.
Aunque no está vinculada legalmente por las recomendaciones de la Asamblea General, siempre ha inscrito en su orden del día las cuestiones sobre las que la Asamblea ha requerido su atención, su Balance está incluido en el de las Naciones Unidas y celebra sus reuniones en el Palacio de las Naciones Unidas en Ginebra (los plenarios suelen reunirse en la Sala del Consejo, conocida como Sala Francisco de Victoria por las pinturas conmemorativas que la presiden, obra de Sert).
La Conferencia es asistida en sus trabajos por el personal de NN.UU. (Oficina de Ginebra del DDA, Departamento para los asuntos de Desarme).
La actual Directora General de la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra es la Secretaria General de la Conferencia de Desarme, y es también el Representante Personal del Secretario General de las Naciones Unidas ante la CD.
Desde su constitución como tal en 1979, este organismo de negociación multilateral de Ginebra fija a comienzos de año su programa de trabajo y orden del día en torno a diversos sectores clave:
Armas nucleares en todos sus aspectos.
Armas químicas; otras armas de destrucción masiva.
Armas convencionales; reducción de presupuestos militares.
Reducción de las fuerzas armadas.
Desarme y desarrollo.
Desarme y seguridad internacional.
Medidas colaterales; medidas para el fomento de la confianza.
Métodos de verificación.
Programa global de desarme.
Los trabajos de la Conferencia se desarrollan bajo la dirección de un Presidente, asistido por un Secretario General y el Departamento de Asuntos de Desarme (ODA), cuyo mandato rotativo ocupan anualmente 6 países miembros según orden alfabético.
La Conferencia funciona en base al principio del Consenso, interpretado como ausencia de oposición explícita de un Estado miembro, esencial al carácter de sus negociaciones que atañen de manera directa a la seguridad de los Estados, y que tienen como objetivo concluir Tratados de vocación Universal.
La Conferencia mantiene la siguiente agenda de trabajo:
- Cesación de la carrera de armamentos nucleares y desarme nuclear.
- Prevención de la guerra nuclear, incluidas todas las cuestiones conexas.
- Prevención de la carrera de armamentos en el espacio ultraterrestre.
- Acuerdos internacionales eficaces que den garantías a los Estados no poseedores de armas nucleares contra el empleo o la amenaza del empleo de esas armas.
- Nuevos tipos de armas de destrucción en masa y nuevos sistemas de tales armas; armas radiológicas.
- Programa comprensivo de desarme.
- Transparencia en materia de armamentos.
- Examen y aprobación del informe anual y de cualquier otro informe, según proceda, a la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Son 4 los temas que han vertebrado los trabajos de la CD en estos últimos años:
La conclusión de un tratado que ponga fin a la producción de material fisible para armas nucleares y otros artefactos explosivos nucleares (más conocido en inglés como FMCT o Fissil Material Cutoff Treaty).
La prohibición de la carrera armamentística en el espacio (o PAROS, también en sus siglas en inglés).
El desarme nuclear.
Las seguridades negativas.
Convención sobre Ciertas Armas Convencionales
La convención sobre la prohibición del uso de ciertas armas convencionales, concluida el 10 de octubre de 1980, abierta a la firma el 10 de abril de 1981 y en vigor desde el 3 de diciembre de 1983, fue ratificada por 50 estados y consta de los siguientes protocolos:
I (fragmentos no detectables)
II y II enmendado (minas y otros artefactos)
III (armas incendiarias)
IV (armas láser cegadoras)
V (restos explosivos de guerra)
El intento de concluir, en este marco, un sexto protocolo sobre municiones en racimo fracasó en 2011. En el ámbito de la convención se celebran, anualmente, reuniones de estados parte y reuniones de expertos de los protocolos II y V.
Convención sobre Municiones en Racimo
Concluida el 30 de mayo de 2008, entró en vigor el 1 de agosto de 2010 y prohíbe el uso, producción, transferencia y almacenamiento de municiones en racimo, estableciendo un marco para la cooperación y la asistencia que garanticen la atención y rehabilitación de las víctimas y de sus comunidades, la educación para la reducción de riesgos y la destrucción de municiones en racimo.
La convención prevé la opción de retener un número mínimo de municiones en racimo para tareas de formación, investigación y entrenamiento de expertos en desactivación de explosivos, así como celebrar reuniones preparatorias en Ginebra hacia mediados de abril de cada año, y reuniones de estados parte, en torno al mes de septiembre, en el país que detenta la presidencia de la Convención.
España, en cumplimiento de las obligaciones recogidas en este nuevo instrumento multilateral, se convirtió, en marzo de 2011, en el primer país en destruir el arsenal de municiones en racimo en poder de sus fuerzas armadas.
Convención sobre Minas Antipersonal
Técnicamente denominada Convención sobre la prohibición de la producción, uso, almacenamiento y transferencia de las minas antipersonal o Convención de Ottawa, aúna los esfuerzos internacionales destinados a erradicar los efectos causados por las minas antipersona.
Concluida el 18 de septiembre de 1997, entró en vigor dos años más tarde y constituye –junto con la convención de municiones en racimo- un modelo de “convención de estados afines” y ha logrado la ratificación por parte de 161 estados.
Anualmente en torno al mes de mayo tienen lugar reuniones de los comités permanentes, así como reuniones de estados parte con sede en el país que cada año ostente la presidencia.
Convención sobre la Prohibición de las Armas Biológicas y Toxínicas
Aborda también su destrucción y fue abierta a la firma el 10 de abril de 1972 para entrar en vigor el 26 de marzo de 1975, con lo que en su artículo primero compromete a estado parte a no desarrollar, producir, almacenar o adquirir este tipo de agentes.
Pese a su importancia como instrumento de cooperación contra las armas biológicas y toxínicas y haber alcanzado un importante grado de universalización, adolece de un régimen de verificación.
La Convención celebra anualmente en Ginebra reuniones de expertos durante el mes de agosto y reuniones de estados parte hacia mediados de diciembre).
UNIDIR (Instituto de las NNUU de Investigación para el Desarme)
Con sede en Ginebra, es un organismo autónomo creado por la Asamblea General en el marco de la Organización de las Naciones Unidas, comenzó su actividad en octubre de 1980 y sus estatutos fueron aprobados por la Asamblea General en diciembre de 1984.
Se financia a través de contribuciones voluntarias de los Estados y de organizaciones públicas y privadas y cuenta con un presupuesto aproximado de 1,1 millones de dólares .
La función del UNIDIR es investigar de manera independiente sobre cuestiones de desarme y problemas de seguridad internacional conexos, especialmente sobre cuestiones de seguridad nacional y, así poder actuar de enlace entre la comunidad investigadora y los Estados miembros de la ONU.
Sus áreas de actividad principales son:
Seguridad mundial y desarme (acuerdos internacionales sobre desarme y su aplicación).
Seguridad regional y desarme (conflictos concentrados en las diferentes regiones del mundo).
Seguridad humana y desarme (minas antipersonal, armas ligeras, consolidación de la paz, etc.).
Su programa de trabajo lo integran diversas actividades:
Proyectos de investigación.
Conferencias y reuniones.
Programa de becas (orientado a la seguridad regional).
El Foro de Ginebra (de intercambios intelectuales, organizado en colaboración con el Programa de Estudios Estratégicos y de Seguridad Internacional, con el Instituto de Altos Estudios Universitarios y con la Oficina Cuáquera ante Naciones Unidas).
La organización, dirección y gestión del Instituto recae sobre un Director nombrado por el Secretario General de Naciones Unidas, previa consulta del Consejo. Su personal permanente es reducido ya que depende, principalmente, de contratos a corto plazo relacionados con cada proyecto de investigación.
Responsables de esta representación a cargo de este organismo
D. Ignacio Sánchez de Lerín García-Ovies
Embajador ante la Conferencia de Desarme
Representante Permanente Adjunto para Asuntos de Desarme
D. Juan Manglano AboínConsejero Diplomático para Asuntos de Desarme -
CERN