En la tarde del lunes, 3 Sus Majestades los Reyes, que viajan a Japón acompañados por el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis, las secretarias de Estado de Comercio, María Luisa Poncela, y de Investigación, Desarrollo e Innovación, Carmen Vela y el Alto Comisionado del Gobierno para la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros, fueron despedidos con honores en el Pabellón de Estado del Aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez.
Don Felipe y Doña Letizia llegaron a media tarde del 4 de abril al Aeropuerto de Haneda de Tokio, donde fueron recibidos por el viceministro parlamentario de Asuntos Exteriores de Japón, Motome Takisawa, y los respectivos embajadores, Gonzalo de Benito y Masashi Mizukami, entre otras personalidades.
En la mañana del miércoles, 5 de abril, Sus Majestades los Reyes fueron recibidos oficialmente por Sus Majestades los Emperadores del Japón en el Palacio Imperial.
Posteriormente, Sus Majestades los Reyes se trasladaron al Museo Nacional de Ciencias e Innovación para asistir a la presentación de los proyectos bilaterales científicos y tecnológicos entre España y Japón. Los Reyes recorrieron el centro acompañados por el Dr. Mamoru Mohri, presidente del Museo y primer astronauta japonés. Durante su visita, pudieron conocer los proyectos de robótica “Asimo”, de la marca Honda, que hizo una demostración de sus habilidades; “Geo-cosmos”, en el que Don Felipe y Doña Letizia siguieron en un globo terráqueo suspendido del techo una proyección en alta definición sustentada con “big data” de un programa sobre el calentamiento global y el incremento de temperatura en la superficie terrestre, y por último, el Proyecto “Super-Kamiokande”, un observatorio de neutrinos, que fue presentado por el Premio Nobel de Física 2015, profesor Takaaki Kajita.
Finalizado el recorrido, los Reyes asistieron a una presentación de los proyectos bilaterales científicos y tecnológicos que ambas naciones tienen en marcha, como el “Proyecto Smart-Cities”, que se está desarrollando en Málaga con la participación de empresas de ambos países, como Mitsubishi y Endesa; el “Proyecto Nanotecnología” de colaboración, que financia 16 proyectos de investigación en nuevos materiales para retos medioambientales y desarrollo sostenible; el proyecto de astrofísica de la Universidad de Tokio y el Instituto de Astrofísica de Canarias, que colaboran en la Red de Telescopios Cherenkov y en la prevista construcción de uno de gran tamaño en la isla de La Palma, y el “Proyecto de fusión nuclear” en el que España –a través del CIEMAT- tiene una importante participación en proyectos de fusión que se desarrollan en Japón.
Don Felipe y Doña Letizia tuvieron también un encuentro con un grupo de científicos españoles que trabajan en el país nipón, todos ellos integrantes de la Asociación de Científicos Españoles en Japón (ACE Japón). Sus Majestades los Reyes se interesaron por las áreas en las que desarrollan sus investigaciones y sus condiciones de vida, además de agradecerles su ayuda para dar a conocer a nuestro país.
A mediodía, Don Felipe y Doña Letizia se reunieron con la colonia española residente en Japón en un hotel de Tokio. Don Felipe les agradeció la “importante contribución” que hacen “todos los días, para proyectar España y compartir con nuestros amigos japoneses lo mejor que podemos ofrecer”. Tras recordar Su Majestad el Rey que “tanto España como Japón son países con una larga historia, un gran dinamismo y una probada capacidad de superación”, destacó que muchos de los asistentes son “auténticos referentes en vuestros respectivos ámbitos, humanos y profesionales” y “nexo de unión entre nuestras dos sociedades, y como tales, contribuís a la mejora de nuestras relaciones, a la diversidad y al mejor entendimiento entre España y Japón”.
Por la noche, Sus Majestades los Emperadores del Japón ofrecieron una cena en honor de Sus Majestades los Reyes en el Palacio Imperial, a la que asistieron Sus Altezas Imperiales los Príncipes Herederos del Japón, Sus Altezas Imperiales los Príncipes Akishino, y Sus Altezas Imperiales las Princesas Mako de Akishino, Kako de Akishino, Tomohito de Mikasa, Akiko de Mikasa, Yoko de Mikasa, Takamado, Tsuguko de Takamado y Ayako de Takamado, así como cerca de 150 invitados.
Su Majestad el Rey comenzó la jornada del jueves, 6 de abril, con un desayuno de trabajo con empresarios japoneses con intereses en España, en el que estuvo acompañado por la secretaria de Estado de Comercio y el embajador de España en Japón, a cuyo término asistió a una reunión con el Comité Bilateral de Cooperación Empresarial España-Japón.
Mientras tanto, Su Majestad la Reina visitó la Universidad de Keio y el Centro de Genética e Investigación Médica aplicada a las Enfermedades Raras, acompañada por la secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación, Carmen Vela. En la Universidad de Keio asistió a la presentación de las ponencias “Mission of AMED: Global Data Sharing for Patients”, a cargo del presidente de la agencia japonesa para la investigación y el desarrollo médico (AMED) y “Briefing on Keio University Hospital, Inmunotherapy Center, and Cáncer Treatment Center”, a cargo del director general del Hospital Universitario Keio y del profesor Naohisa Yahagai, del centro de Inmunoterapia Oncológica, al terminar estas realizó un breve recorrido por las instalaciones del centro de Inmunoterapia Oncológica, visitando la zona de tratamiento de pacientes y la farmacia.
Posteriormente Su Majestad la Reina se trasladó al Centro de Genética e Investigación Médica donde, en la sala de Conferencias, asistió a la presentación de la ponencia “IRUD (Initiative on Rare and Undiagnosed Diseases)”, a cargo del director del Centro de Genética Médica de la Escuela de Medicina de la Universidad de Keio, al terminar Doña Letizia realizó un visita a las instalaciones del Centro de Genética e Investigación Médica.
A mediodía, Don Felipe recibió en audiencia a una representación de personalidades japonesas vinculadas al hispanismo y a los estudios de lengua y cultura españolas, así como a galardonados de nacionalidad japonesa con el Premio Príncipe de Asturias.
Por la tarde, Sus Majestades los Reyes se trasladaron al Palacio de Akasaka, donde tras un encuentro con el Primer Ministro de Japón, tuvo lugar la ceremonia de intercambio de acuerdos y memorandos entre el Reino de España y Japón. Posteriormente, el Primer Ministro de Japón, Shinzo Abe, ofreció una cena en honor de Don Felipe y Doña Letizia. En su intervención, Su Majestad el Rey celebró la firma de estos instrumentos bilaterales de cooperación.
El viernes, Sus Majestades los Reyes y Sus Majestades los Emperadores del Japón viajaron en el tren Shinkansen -tren bala- a la ciudad de Shizuoka, en un trayecto que duró poco más de 1 hora y con breves paradas en las estaciones de Shinagawa y Shin-Yokohama, para visitar el Centro de Estudio, Concienciación y Prevención de Catástrofes Naturales provocadas por movimientos sísmicos de la prefectura de Shizuoka, donde recorrieron el Área Sísmica, en la que pudieron observar mediante maquetas mecanizadas la traslación de energía de un maremoto sobre la costa y de un terremoto sobre un edificio, y el Área de experimentación de efectos sísmicos, donde una empleada del centro hizo una demostración sobre una silla mecanizada del movimiento de un terremoto de intensidad 6 y 7 sobre la escala de Richter.
A media mañana, los Reyes se trasladaron al Complejo Fugetsuro, donde se muestra el reloj original regalado por Su Majestad el Rey Felipe III al gobernador Tokugawa Ieyasu, en 1611, como muestra de gratitud por el rescate de la tripulación del galeón español San Francisco hundido en Onjuku, al norte de Tokio y que en la actualidad se custodia en el Templo Tunozan Koshogu.
Tras un almuerzo ofrecido por los Emperadores de Japón en honor de Sus Majestades los Reyes, se trasladaron al Templo Sengen Jinja, donde el Coro de niños del “Shizuoka City Aoi Elementary School”, interpretaron la canción de bienvenida tipo Kiyari, de origen del siglo XIX “Lumbers-carriers song”, y asistieron al espectáculo de danza tradicional japonesa “Chigomai”. Una ceremonia de despedida oficial en la sala Casablanca del Templo, puso fin al Viaje de Estado de Sus Majestades los Reyes a Japón, que desde el Aeropuerto Monte Fuji-Shizuoka pusieron rumbo a España.