Desde el 19 de junio, las WFOEs (empresas de capital 100% extranjero, por sus siglas en inglés) cuya actividad sea el tratamiento de datos online y el procesamiento de transacciones pueden ser propietarias del total de acciones de una compañía del sector e-commerce.
Esta nueva política del Ministerio de Industria e Información Tecnológicas (MIIT) amplia el poder inversor extranjero. Hasta ahora, la inversión extranjera máxima en empresas de comercio electrónico estaba fijada en el 50% de las acciones para empresas fuera de las zonas de libre comercio (donde sí se permitía al capital extranjero controlar el 100% del capital de empresas de comercio electrónico).
En 2014, el mercado e-commerce en China alcanzó los 390.000 millones de dólares. Este sector ha crecido anualmente a un ritmo del 50% en los últimos cinco años y se espera que alcance en 2015 los 520.000 millones de dólares. Se estima que, dentro de tres años, esta industria será mayor que las de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia y Japón sumadas.