El Embajador de España en Pekín, Manuel Valencia, organizó un encuentro en la Embajada el miércoles 12 de marzo con un grupo de hispanistas y antiguos alumnos de español, con motivo de un homenaje en recuerdo a la profesora María Lecea, que vivió en China e impartió el español aquí en la década de los sesenta del pasado siglo.
Lecea fue una pionera de la enseñanza del español en China. Su nombre y recuerdo quedarán inmortalizados en el Centro de Recursos que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España pone a disposición de los departamentos de español en China, a través de la Consejería de Educación.
Lecea nació en Madrid en 1922 y murió en Málaga en 2003. En 1939 salió de España y se instaló en la URSS, donde residió durante 15 años, se licenció en lengua y literatura española y trabajó como profesora de español durante 7 años en la Universidad de Moscú. En el año 1955 y gracias a un programa de colaboración entre Rusia y China, comenzó a impartir español en este país. Hasta finales de los años 80, Lecea contribuyó de forma notoria a la formación de las primeras generaciones de diplomáticos, profesores e hispanistas chinos a través del departamento de Estudios Extranjeros de Pekín.
En 1986, recibió en la Embajada de España en la R.P. China, la Encomienda de Alfonso X el Sabio que otorga el Ministerio de Educación español, como reconocimiento a su labor en la difusión de la lengua, literatura y cultura españolas. En marzo de 1992, fue galardonada con el premio de la Amistad del Gobierno chino por su larga e intensa labor en la enseñanza del español en China. Lecea dejó una profunda huella en sus alumnos, algunos de ellos consolidados como los más prestigiosos hispanistas chinos. En palabras del célebre hispanista, Dong Yansheng, María Lecea puede ser considerada como la madre del hispanismo chino.