Ayer se realizó en la sede de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado de los Estados Unidos la ceremonia de descubrimiento del retrato de Bernardo de Gálvez, para quien el Congreso había aprobado la concesión de la nacionalidad honorífica de los Estados Unidos el pasado jueves 4 de diciembre.
El mariscal de campo Bernardo de Gálvez y Madrid, conde de Gálvez, natural de Macharaviaya (Málaga), tuvo, como culminación de una brillante carrera militar, una actuación muy destacada en la guerra de independencia de los Estados Unidos en ayuda de las colonias sublevadas contra el poder de la metrópoli. Por ese motivo, en el primer Congreso Continental de 1783 los padres fundadores de los Estados Unidos decidieron honrar su memoria con la instalación de su retrato en el Capitolio. La ceremonia de ayer viene a cumplir, 231 años después, esa decisión.
La moción del Congreso aprobando la concesión de la nacionalidad honorífica de los Estados Unidos a Bernardo de Gálvez requiere para su efectividad su sanción por el presidente. Esta distinción sólo se ha concedido hasta la fecha a siete personas, desde la primera otorgada en 1963 a quien fuera primer ministro del Reino Unido durante la segunda guerra mundial, Winston Churchill. La decisión del Congreso en honor de Bernardo de Gálvez pone de manifiesto los estrechos vínculos históricos que unen nuestros dos países.