España muestra su satisfacción por la decisión del pasado 13 de marzo del Gobernador de California, Gavin Newsom, por la que introduce una moratoria de la pena de muerte mientras dure su mandato. La Orden refuerza la tendencia de Estados Unidos hacia la desaparición de la pena capital; sólo 8 Estados la aplicaron en 2017.
La pena de muerte sólo añade dolor al dolor producido por los criminales, sin que disuada a futuros delincuentes ni alivie a los familiares de sus víctimas. La espera en el corredor de la muerte equivale a una tortura continua para los detenidos y sus familias.
España seguirá apoyando la abolición de la pena de muerte en todas las instancias y en todas las circunstancias.