España condena el atentado que ha costado la vida a numerosas personas en un lugar tan emblemático y respetado como el templo de Erawan, en el centro de Bangkok, y expresa sus sentidas condolencias a los familiares de las víctimas, a la vez que desea una pronta y plena recuperación de los heridos.
El gobierno transmite su solidaridad a las autoridades y al pueblo de Tailandia, y espera que los culpables de este acto de barbarie respondan ante la justicia cuanto antes.