El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha recibido hoy en el Palacio de Santa Cruz al Alto Representante en Bosnia y Herzegovina, Valentin Inzko, autoridad ejecutiva en el país y a quien corresponde velar por el cumplimiento de los mandatos del Tratado de Paz de Dayton. Se trata del primer encuentro entre ambos y también de la primera visita oficial del Alto Representante a España.
Durante la reunión, ha tenido lugar la firma del “Acuerdo de Protección de Intereses del Alto Representante, su Oficina y su Personal entre el Reino de España y el Alto Representante en Bosnia y Herzegovina”. Con este importante acuerdo se renueva el compromiso de nuestro país con la paz y la estabilidad en Bosnia y Herzegovina. El acuerdo garantiza el respeto de los privilegios e inmunidades de que gozan el Alto Representante, su Oficina, su personal y sus archivos, cuando se cierre la Oficina, conforme a lo dispuesto en el Anexo X del Acuerdo de Paz de Dayton.
En el encuentro, el Alto Representante ha repasado junto al Ministro García-Margallo los principales temas de la actualidad socioeconómica y política de Bosnia y Herzegovina. García-Margallo ha destacado cómo España ha estado presente en el país desde el inicio del conflicto, tanto con el envío de tropas para la pacificación del territorio como mediante la colaboración activa en la reconstrucción y estabilización del país.
España, ha destacado García-Margallo, valora positivamente los esfuerzos que viene realizando la Oficina del Alto Representante en Bosnia y Herzegovina. Igualmente, el ministro ha recordado a Inzko que puede seguir contando con el apoyo de España para afrontar las importantes reformas estructurales que aún precisa el país para su total estabilidad.
El Alto Representante ha aprovechado la ocasión para subrayar el reconocimiento y agradecimiento del pueblo de Bosnia y Herzegovina a la implicación de España y nuestros esfuerzos en el país. No en vano, la principal plaza de Mostar se denomina “Plaza de España”, y hay en ella un monumento en recuerdo a los veintidós soldados españoles caídos en ese mismo lugar en acto de servicio.