El Gobierno de España sigue con gran preocupación los ataques con medios electrónicos ocurridos en Líbano los días 17 y 18 de septiembre, que han causado decenas de muertos y miles de heridos, con numerosas víctimas entre la población civil.
Los ataques indiscriminados son contrarios al Derecho Internacional Humanitario y amenazan la seguridad y la estabilidad del Líbano, de Israel y de toda la región.
Llamamos a la contención a todos los actores. Es necesario evitar una escalada de la violencia aún mayor y el riesgo de una guerra abierta con consecuencias imprevisibles.