Las autoridades ucranianas firmaron ayer día 15 el Memorando de Entendimiento por el que se despliega una Misión Especial de Observación de la OSCE en Ucrania. Este acuerdo debe ser ratificado por la Rada ucraniana.
España mantiene su compromiso firme con el trabajo que desempeña la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) en Ucrania, con el objetivo de avanzar en la estabilidad y seguridad de Europa, a través de sus distintos instrumentos y mecanismos, tales como el seguimiento político, la observación electoral, la facilitación del diálogo y apoyo a la mediación.
España, en sus esfuerzos por apoyar y acompañar los procesos de fortalecimiento democrático, como clara expresión de su compromiso por la promoción y protección de los derechos humanos y los valores democráticos, envió un observador a la Misión de Verificación militar en Ucrania y, ahora, participa en la Misión Especial de Observación de la OSCE con varios monitores. No se descarta que esta participación sea mayor si se decide la ampliación de la Misión.
Asimismo, España va a participar en la Misión de Observación Electoral de la ODHIR de las próximas elecciones presidenciales que tendrán lugar en Ucrania el 25 de mayo, con un total de 19 observadores.
España es consciente de la necesidad de que todos los países miembros de la OSCE apoyen la soberanía e integridad territorial de Ucrania, así como el derecho de cada país europeo para decidir su propio destino, de conformidad con el Acta Final de Helsinki. En este sentido, la decisión de la Unión Europea de no reconocer efecto alguno al denominado “referéndum” en Crimea, dado su carácter ilegal e inconstitucional, es una muestra más de apoyo a Ucrania. España seguirá trabajando para encontrar soluciones políticas y diplomáticas a la actual crisis.
España ha señalado además en diversas ocasiones la conveniencia de continuar los esfuerzos políticos y diplomáticos en curso y el diálogo político con Rusia a fin de mantener abiertas las puertas para alcanzar acuerdos. En ese sentido, la OSCE, organización a la que pertenecen tanto Ucrania como Rusia, desempeña un papel fundamental en la creación de medidas de confianza que permitan reducir la tensión y evitar nuevas escaladas en la actual crisis.