Los días 19 y 20 de mayo se ha celebrado en Bruselas la reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN, a la que ha asistido el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo. El objetivo principal de esta reunión ministerial ha sido la preparación de la próxima Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, que se celebrará en Varsovia el 8 y 9 de julio, y la firma del Protocolo de Adhesión de Montenegro al Tratado de Washington de 1949 por parte de los 28 ministros de Asuntos Exteriores, que contó con la presencia del Primer Ministro montenegrino, Milo Djukanovic.
Los ministros de los países Aliados abordaron el papel de la OTAN para proyectar estabilidad más allá de sus fronteras, particularmente ante algunas de las crisis actuales como el conflicto en Iraq y Siria y la lucha contra Daesh, los flujos migratorios a Europa desde esos países y desde el norte de África o la situación en Libia, y han aprobado un documento sobre el refuerzo de la contribución de la organización a los esfuerzos de la comunidad internacional para proyectar dicha estabilidad.
Durante la cena de trabajo de ayer, los ministros trataron las relaciones de la OTAN con Rusia en el contexto de la crisis de Ucrania y la anexión ilegal de Crimea. La reciente reunión del Consejo OTAN-Rusia el pasado 20 de abril, tras casi dos años, fue una buena noticia para el restablecimiento del diálogo en temas de interés compartido, y los Ministros han decidido promover una nueva reunión del Consejo OTAN-Rusia al mismo nivel antes de la Cumbre.
En una sesión de trabajo de hoy, que ha contado con la presencia de la AR/VP Mogherini y los ministros de Asuntos Exteriores de Suecia y Finlandia, se ha tratado de avanzar en la definición de una cooperación más estrecha entre la OTAN y la UE, en especial ante situaciones de guerra híbrida, seguridad marítima y otros asuntos, de cara a avanzar en el Consejo Europeo de junio y en la Cumbre de la OTAN en Varsovia.
Finalmente, los ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN han reafirmado el compromiso de la Alianza Atlántica con el futuro de Afganistán, en el marco de la misión “Resolute Support”. Esta última sesión ha contado también con la participación de los ministros de Asuntos Exteriores de Afganistán, Japón y Corea de Sur, junto con los representantes de la UE y Naciones Unidas.