El Gobierno de España condena el bombardeo a la iglesia de la Sagrada Familia en Gaza, que servía también de refugio para cientos de palestinos, y que ha provocado la muerte de al menos tres personas y varios heridos.
Exigimos el respeto de los lugares especialmente protegidos por el derecho internacional humanitario, e instamos al cese inmediato de las hostilidades y de los ataques indiscriminados a la población civil.
El Gobierno de España reitera la urgencia de alcanzar un alto el fuego que permita la liberación de los rehenes y la entrada de ayuda humanitaria.