El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito, se ha reunido hoy con la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los derechos humanos, Navanethem Pillay, que se encuentra en España para participar en la sesión de clausura del V Congreso mundial contra la pena de muerte.
Durante su estancia los días 14 y 15 de junio, Pillay también ha mantenido encuentros con el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, el secretario de Estado de Justicia, Fernando Román García, y la defensora del pueblo, Soledad Becerril. La Alta Comisionada ha sido además recibida por S.A.R el Príncipe de Asturias en el Palacio de la Zarzuela.
España mantiene una relación fluida y de diálogo activo con la Alta Comisionada y la oficina que ella preside. En el encuentro, De Benito ha traslado a Pillay el compromiso que mantiene España con Naciones Unidas y además, en particular, con la labor que realiza esa oficina en la promoción y protección de los derechos humanos.
El respaldo español a la oficina del alto comisionado queda patente además de por una relevante contribución financiera a su funcionamiento, por el profundo compromiso español con sus valores y principios.
Pillay ha agradecido a Gonzalo de Benito el respaldo que España viene ofreciendo a la oficina del Alto Comisionado para los derechos humanos, y el intenso trabajo que está desempeñando en cuestiones como el reconocimiento del derecho humano al agua y al saneamiento, los derechos de las personas con discapacidad o la protección de defensores de derechos humano, así como en el ámbito de las empresas y los derechos humanos. Al mismo tiempo, ha señalado como ejemplo de buenas prácticas las políticas de integración de la población gitana en España.
Asimismo, se ha mostrado muy satisfecha por la organización del V congreso mundial contra la pena de muerte, que ha tenido una participación inusitada en este tipo de eventos, y que aporta una contribución significativa a la lucha por la abolición universal de la pena de muerte, un área que es prioritaria tanto para la política exterior de derechos humanos de España como para la oficina de la Alta Comisionada.