Cuando se cumplen siete años de su comienzo, el gobierno español expresa su consternación por la persistencia de la guerra que asola Siria y que ha provocado más de 400.000 muertos, 11 millones de refugiados y desplazados, una catástrofe humanitaria y un sufrimiento atroz.
Es urgente que el pueblo sirio quede libre de los bombardeos masivos, las armas químicas, la violencia infinita y del régimen de terror de DAESH, así como de la escasez, el exilio o la discriminación.
Por ello, el Gobierno de España llama, hoy en especial, a todas las partes a asumir sus responsabilidades:
- Cumpliendo la Resolución 2401 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de 24 de febrero de 2018 en todos sus extremos, tanto el alto el fuego en todo el territorio sirio como el acceso humanitario a todas aquellas poblaciones necesitadas.
- Retomando el proceso negociador y el diálogo político en el marco del Proceso de Ginebra, de conformidad con la Resolución 2254 (2015) CSNU bajo el liderazgo del Enviado Especial del SGNU, Staffan de Mistura.
- Iniciando los trabajos de la Comisión Constitucional acordada en la Conferencia de Diálogo Nacional de Sochi de enero de 2018.
El gobierno de España sigue defendiendo una solución política que respete la unidad, integridad territorial y soberanía del país. El futuro de Siria debe basarse en un marco de convivencia democrático entre personas y comunidades sin discriminación alguna por razón de género, etnia o religión.
Finalmente, España defiende que se investiguen todas las violaciones contra el Derecho Internacional Humanitario y que los responsables de las mismas sean llevados ante la Justicia y con este fin ha apoyado y patrocinado organizaciones y mecanismos ad hoc.