España condena firmemente la violencia indiscriminada y destrucción provocada por el asalto del régimen de Bashar al Assad contra la ciudad de Qusair, que ha producido ya numerosos muertos y heridos, muchos de ellos civiles. El Gobierno de España llama al régimen sirio a detener la operación y evitar así el derramamiento de sangre.
Asimismo, España llama al fin de la violencia en Siria, de forma que se haga posible una solución política al conflicto que permita al pueblo sirio hacer realidad su legítima aspiración de vivir en paz y democracia. Ante el agravamiento de la violencia, que compromete la seguridad y la estabilidad de la región, es fundamental redoblar los esfuerzos diplomáticos orientados a buscar dicha solución.