El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Gonzalo de Benito, ha asistido hoy en Lisboa a la reunión de ministros de Asuntos Exteriores del Diálogo 5 + 5, integrado por España, Francia, Italia, Malta y Portugal, por la orilla norte del Mediterráneo, y Argelia, Libia, Marruecos, Mauritania y Túnez, por la orilla sur. Ha acompañado en la reunión al ministro de Defensa, Pedro Morenés, que preside en 2014 el formato de Defensa del Diálogo.
El ministro Morenés ha destacado en su intervención que los diez países pertenecen a un espacio común de paz y estabilidad, un punto de encuentro más que una frontera. No obstante, ha subrayado, la región ha sufrido en los últimos tiempos amenazas desestabilizadoras originadas en las regiones vecinas, como son el terrorismo transnacional y el crimen organizado, el tráfico de seres humanos, de drogas y de armas. Ante estos riesgos para los países que integran la iniciativa, España apuesta por una respuesta activa y por que los socios permanezcan unidos, apoyándose mutuamente.
El ministro de Defensa también ha destacado la importancia del control de fronteras y ha apostado por el desarrollo social y económico como vehículo de estabilidad y seguridad.
La discusión de los ministros se ha centrado sobre todo en la preocupante situación que atraviesa Libia, así como los posibles mecanismos para ayudar al país a regresar a la estabilidad y el desarrollo, y la necesidad de que avance en el diálogo y la reconciliación nacional. Varios países, entre ellos España, han nombrado enviados especiales para fomentar la coordinación en esta materia.
En la declaración final, en el ámbito político se analizan los procesos de cambio en el norte de África, felicitándose por los avances en Túnez, y mostrando preocupación por la situación en Libia.
Se abordan también las migraciones, recogiendo la necesidad de luchar contra las causas profundas de la migración y de contar con un enfoque global y equilibrado a la hora de analizarla, para evitar que se repitan tragedias como las recientes.
Otro punto recogido por los ministros en la declaración es la importancia del desarrollo de interconexiones energéticas en el seno de la Unión Europea, lo que permitirá un mercado energético más integrado en el Mediterráneo. En efecto, mejores interconexiones, especialmente entre España y Francia, permitirán una mejor canalización y distribución del suministro de energía procedente del norte de África a Europa.
En el ámbito económico, los ministros saludan que el primer Foro Económico celebrado en Barcelona en octubre de 2013 haya continuidad con el Foro Económico de Lisboa de ayer. Los ministros han acordado también crear un nuevo capítulo del Diálogo sobre economía y comercio.
Otros temas abordados en la declaración son el agua, el medio ambiente, el cambio climático, y la interrelación del Diálogo 5+5 con la Unión Europea, la Unión del Magreb Árabe, y la Unión por el Mediterráneo.
España es, desde el inicio, un miembro activo y dinámico del Diálogo 5+5 y otras iniciativas regionales. Dos de ellas merecen especial mención: la iniciativa hispano-marroquí sobre mediación en conflictos en el ámbito mediterráneo, y la iniciativa hispano-argelina para una estrategia del agua en el Mediterráneo Occidental.