El Embajador Representante Permanente de España ante Naciones Unidas, Román Oyarzun, participó el pasado 12 de febrero en el debate abierto del Consejo de Seguridad sobre “Protección de Civiles en Conflictos Armados”, junto a la alta comisionada de Derechos Humanos, Navi Pillay, la secretaria general adjunta para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, el secretario general adjunto para Operaciones de Mantenimiento de la Paz, Hervé Ladsous, y el director del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Yves Daccord.
En su intervención, el Embajador agradeció la labor que desempeña el Consejo de Seguridad y su gran dedicación respecto a los temas a los que España se siente muy vinculada: la relación del Consejo con los organismos regionales, el estado de derecho y la protección de civiles.
En el caso de la protección de civiles, objeto del debate, España hizo un llamamiento a una acción firme y decidida por parte de la comunidad internacional para una estricta observación de las reglas centrales para la protección de la población civil como la proporcionalidad, la distinción entre combatientes y no combatientes y la adopción de medidas para evitar o minimizar daños a la población civil.
El Embajador señaló que todavía existen desafíos a los que todos los países deben hacer frente como el logro de mandatos claros y realistas para responder a la situación sobre el terreno; la dotación suficiente de las operaciones de mantenimiento de la paz; y la elaboración de estrategias de protección de civiles y su integración en todas las fases de las operaciones de mantenimiento de la paz.
A lo largo del debate, España mostró su gran preocupación por la utilización de bombas y explosivos en centros urbanos que causan la muerte o mutilación de civiles y la destrucción de infraestructuras; el uso de la violencia sexual como un arma o estrategia militar en los conflictos; y los ataques a personal e instalaciones médicas y a personal humanitario. En este sentido, se recordó el necesario acceso humanitario sin restricciones ni trabas como condición esencial para la protección de la población civil en conflictos armados.
Por último, el Embajador recordó el importante papel de la diplomacia preventiva y la mediación inclusiva para la prevención de conflictos. Por ello, convencida de la eficacia de estos instrumentos, España, junto a Marruecos, es miembro activo del Grupo de Amigos para la Mediación y promotora de una Iniciativa para la mediación en el Mediterráneo.