El Ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, alertó hoy sobre la progresiva erosión y malestar con la democracia que se produce en el entorno internacional.
“En este siglo XXI, estamos librando también una de las batallas más decisivas por la defensa de la democracia y los valores que representa tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Es, por tanto, un momento clave a nivel mundial en el que, además, los devastadores efectos socioeconómicos de la pandemia nos obligan a realizar un ejercicio de reflexión en el presente de cara al futuro”, afirmó en la inauguración de la iniciativa
“Por un nuevo contrato social. Renovar la democracia para no dejar a nadie atrás” que tiene lugar hoy en Casa de América.
El seminario es un proyecto del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Fundación Carolina que pretende profundizar en la reflexión conjunta sobre el malestar de la democracia y la crisis de gobernabilidad en América Latina y el Caribe, así como contribuir a la modernización institucional y el fortalecimiento de la democracia, de forma coherente con el compromiso permanente de España con los países de la región.
“A escala global, por ejemplo, el Varieties of Democracy Institute advierte, en su informe anual de 2022, que hemos retrocedido 30 años en materia democrática y que la democracia se encuentra en la actualidad a niveles previos a 1989”, afirmó Albares.
“En el último informe del Latinobarómetro, se señala asimismo que la crítica de los ciudadanos a la democracia, es una demanda de democracia. No se pone por tanto en duda el sistema, la democracia. Sino que el debate gira en torno al propio funcionamiento y su capacidad para dar respuestas a los anhelos de las sociedades y que está en la esencia misma del “contrato social” que nos hemos dado”, enfatizó.
“Otros estudios revelan asimismo que la indiferencia es parte sustantiva de la decepción por el mal funcionamiento de la democracia. Una indiferencia que ha aumentado en 11 puntos durante la última década, pasando del 16 por ciento en 2010 al 27 por ciento en 2020, según la última edición del Latinobarómetro”, explicó Albares.