La Convención de la UNESCO sobre la Protección del Patrimonio Cultural Subacuático tiene por finalidad posibilitar a los Estados Partes la mejora de la protección de su patrimonio subacuático como elemento de particular importancia en la historia de los pueblos, las naciones y sus relaciones mutuas.
En este contexto, se tiene como principio básico la obligación de los Estados Partes de preservar su patrimonio cultural subacuático así como respetar todos los restos humanos que se hallen en las aguas de su territorio.
Otros principios importantes de la convención son:
la preservación “in situ” como opción prioritaria;
la no exploración comercial con fines de lucro o especulativos;
la no diseminación de este patrimonio cultural de forma irremediable;
el deber de cooperación de intercambio de información entre los Estados Partes;
la promoción por parte de los mismos de la formación en arqueología subacuática;
el impulso de la sensibilización de la opinión pública al valor de importancia del Patrimonio Cultural Subacuático.