El Embajador Representante Permanente de España ante las Naciones Unidas, Agustín Santos Maraver, ha intervenido en la continuación del undécimo período extraordinario de sesiones de emergencia de la Asamblea General sobre Ucrania. En la misma, se ha adoptado la resolución sobre la suspensión de los derechos de la Federación de Rusia a formar parte del Consejo de Derechos Humanos.
A continuación, la intervención completa de España:
Sr. Presidente,
España ha votado a favor de la resolución que suspende los derechos de la federación Rusa como miembro en ejercicio del Consejo de Derechos Humanos, y se alinea con la declaración realizada por la Unión Europea en nombre de sus estados miembros.
Cuando los estado miembros de NNUU son elegidos a dicho Consejo se comprometen a respetar y promover en un sentido ejemplar los DDHH, como requiere la resolución 60/251.
Más de un mes después de la invasión y la guerra ilegal e injusta impuesta por la Federación Rusa a la República de Ucrania, las informaciones y las imágenes de la destrucción y la muerte sembradas por las tropas invasoras son innegables. Nada de esto hubiera ocurrido si la Federación Rusa se hubiera comprometido a la resolución pacífica de las controversias en el proceso de Normandía, aplicando los Acuerdos de Minsk. La causa principal de la violación masiva de los derechos humanos y el derecho humanitario es la invasión militar de la Federación Rusa.
Por eso esta Asamblea General ha condenado ya en dos ocasiones esa invasión. La primera por no respetar la Carta y su imperativo categórico del respeto de la integridad y soberanía de los estados. La segunda exigiendo el respeto del derecho humanitario.
No se puede ser juez y parte, miembro en ejercicio pleno del Consejo de Derechos Humanos y presunto violador de esos mismos derechos. Los mismos países que se abstuvieron o rechazaron la resolución 49/1 del Consejo de Derechos Humanos que ha creado la Comisión de Investigación de violaciones de derechos humanos en Ucrania hoy han alegado que no haya podido finalizar sus trabajos para llamar a rechazar o abstenerse en la resolución que acabamos de adoptar.
En algo coincidimos con ellos: es imprescindible establecer mediante los mecanismos existentes y la Corte Penal Internacional si las evidentes violaciones de derechos humanos que testimonian los cadáveres abandonados en Bucha, los bombardeos sobre ciudades y la destrucción de infraestructura vital son crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Pero mientras estos procesos de investigación se producen, con efectos judiciales, hay un principio moral de respeto a la Carta, en el que se basa su legitimidad, que debe ser ejercido. Como hemos hecho hoy, suspendiendo al agresor del Consejo de Derechos Humanos, mediante una decisión de esta Asamblea General. Un proceso excepcional, sí, porque es también excepcional e injustificable esta invasión y esta violación por la Federación Rusa de la Carta de Naciones Unidas.
España espera que el gobierno ruso oiga el clamor internacional contra su invasión. Que haya un cese el fuego inmediato. Que las negociaciones, en pleno respeto del derecho internacional, no la razón de la fuerza, permitan rápidamente alcanzar la paz. Qué dejen de morir las gentes de Ucrania, que se retiren las tropas rusas, que se respeten plenamente los derechos humanos y el derecho humanitario tanto en Ucrania como en la Federación Rusa. Que Ucrania recupere su integridad territorial.
Mientras tanto, como declaró el Presidente del Gobierno ante el Congreso de los Diputados de nuestro país, España estará con Ucrania, en solidaridad con sus ciudadanos, asistiendo a sus refugiados y defendiendo el derecho internacional.