El Gobierno de España condena la ejecución en Irán de Navid Afkari, de 27 años, un deportista que había representado a su país en muchas competiciones deportivas.
España es contraria a la pena de muerte en todas las circunstancias. En este caso, al hecho de su ejecución se une que muchas personalidades y organizaciones internacionales habían pedido al Gobierno iraní clemencia.
El Gobierno de España pide a Irán reducir el uso de la pena de muerte con vistas a su abolición, como han hecho tantos otros países de la comunidad internacional. Espera que la reacción de rechazo suscitada por la ejecución de Navid Afkari refuerce la política iniciada por las autoridades iraníes en 2018, cuando una reforma de las leyes que castigan el tráfico de drogas redujo drásticamente el número de ejecuciones.
España ofrece su ayuda y su membresía de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte para asistir a las autoridades iraníes a reforzar la dignidad humana reduciendo y combatiendo la pena de muerte, todo ello con respeto a su soberanía.