El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación acaba de facilitar el regreso a España de 275 turistas, que se encontraban bloqueados en diferentes islas de Filipinas debido a las severas limitaciones impuestas por la pandemia del COVID-19, de los que 157 españoles, 106 ciudadanos de la Unión Europea y asimilados (Noruega, Suiza y Reino Unido) y 12 ciudadanos de otras nacionalidades.
La compleja operación, ha venido precedida por un amplio operativo previo en el que la Embajada de España en Filipinas venía trabajando con intensidad para facilitar la concentración de todos los pasajeros en Manila, punto del que partió el avión que mañana se prevé que llegue a España.
Las gestiones directas de la Embajada con el Ministerio de Transportes filipino y la Guardia Costera, facilitaron que pusieran a disposición de España buques oficiales para el traslado nocturno de un total de 38 viajeros desde las islas de Siquijor, Dumaguete y Bohol a Cebú. A esa última isla también se facilitó la llegada de 14 españoles que se encontraban en la isla de Malpascua, junto a dos italianos, a los que se sumaron otros cuatro españoles desde la isla de Bantayan.
De esta forma, se pudo organizar un vuelo de Cebú a Manila con 130 pasajeros a bordo; al que hay que añadir otro vuelo de Siargao a Puerto Princesa para terminar en Manila con otros 61 pasajeros; que se suman a los 26 llegados desde otros puntos de la isla Luzón que fueron directamente al aeropuerto internacional de Manila.
Pese a las severas restricciones vigentes en el país, la Embajada de España ha conseguido las pertinentes autorizaciones para que tanto los vuelos que han ido recogiendo a pasajeros entre las islas como el avión que les lleva a Madrid pudieran operar en un espacio aéreo muy restringido.
Se ha hecho un seguimiento individualizado telefónico y por email de cada uno de los pasajeros hasta llegar al punto de concentración, cuya accesibilidad se ha garantizado a través de un documento nominativo expedido por el Consulado de España del que se ha hecho llegar copia a cada oficina provincial del Ministerio de Turismo filipino. La Embajada ha hablado, además, con Ministros, gobernadores y alcaldes de cada una de las islas en las que había pasajeros para garantizar su movilidad.
Antes de embarcar en el avión en el aeropuerto internacional de Manila, se distribuyeron mascarillas para cada pasajero que llevó la tripulación del avión de Iberia, y los bares y restaurantes regentados por españoles en Manila ofrecieron una merienda a los pasajeros.
Con esta operación, que se ha realizado a través del Mecanismo Europeo de Protección Civil, el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación ha facilitado ya el retorno de unas 600 españoles desde el principio de la cuarentena en Filipinas, el pasado 15 de marzo. Un total de 94 turistas españoles han expresado su voluntad de permanecer en Filipinas por diferentes razones mientras que se cifran en unos 1.200 los ciudadanos europeos que aún intentan salir del país.