10/05/2013. El 9 de mayo se presentó en Milán el tercero de los informes que sobre la economía española ha elaborado hasta la fecha el Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC) y que lleva por título “España, país de oportunidades”. La presentación corrió a cargo de José Manuel Campa (profesor de la Universidad de Navarra y el IESE y ex-Secretario de Estado de Economía) y de Fernando Casado (Director General del CEC) mientras que Carmen Postigo, Directora de la Agencia EFE en Italia, moderó el debate posterior.
El Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC) se constituyó en febrero de 2011 como un think tank para aportar propuestas que mejoren la competitividad española. El CEC está integrado por el Instituto de Empresa Familiar y por 15 compañías que, en su conjunto, dan empleo a más de 1,7 millones de trabajadores y representan una facturación agregada del 35% del PIB español: Acciona, ACS, Banco Santander, BBVA, El Corte Inglés, Ferrovial, Grupo Planeta, Iberdrola, Inditex, La Caixa, Mango, MAPFRE, Mercadona, Repsol, Telefónica.
La principal conclusión de este tercer informe del CEC es que los ajustes que está realizando la economía española, unidos al hecho de que se hayan disipado las principales dudas sobre el proyecto europeo, permiten que España recupere su atractivo como destino inversor y se sitúe como un país de oportunidades para emprender y hacer negocios, gracias a la mejora de la competitividad y a la existencia de un tejido empresarial innovador y con una fuerza laboral altamente cualificada.
El estudio establece que España presenta ya ventajas significativas en aspectos claves relativos a los niveles de competitividad e innovación. Entre dichas fortalezas se encuentra el porcentaje de población con educación superior (32%), que es uno de los más elevados de Europa y por delante de Alemania o Francia, entre otros. Igualmente hay que incluir entre las fortalezas, las avanzadas infraestructuras y redes de telecomunicación, los niveles de excelencia en producción científica, la posición geoestratégica clave para acceder a mercados de gran potencial como los de América Latina y las crecientes tasas de productividad, que el estudio prevé que aumenten el doble que el promedio de la zona euro en los próximos dos años, llegando así a superar a las del mercado alemán en 2014.
Dichas ventajas comparativas tienen su reflejo en la significativa evolución de las exportaciones, que se sitúan un 26% por encima de su valor anterior a la crisis, habiéndose diversificado hacia economías con mayores oportunidades de crecimiento, con un aumento del 15% en el caso de América Latina, 31% de África o 12% de Asia.
El informe presta especial atención a aquellos sectores de actividad en los que la economía española presenta mayores niveles de competitividad y fortaleza, y que se caracterizan por ser intensivos en innovación, muy orientados al sector exterior y presentar las mejores tasas de productividad. En concreto, España alcanza un elevado dinamismo y liderazgo europeo en actividades vinculadas a sectores como la automoción, biotecnología, TICs, agroalimentario, aeroespacial y máquina-herramienta. Estos ámbitos de la actividad económica suponen actualmente el 35% del PIB nacional y el 42% de las exportaciones, al tiempo que generan dos millones de empleos.
Según se deriva del informe, la agenda de reformas estructurales acometidas en varios ámbitos (fiscal, financiero, laboral,...) ha sido determinante para crear un entorno receptivo a la inversión y, como resultado, para mantener la confianza de los inversores extranjeros en la economía española. Así lo corroboran las cifras que sitúan el flujo de entrada medio de Inversión Extranjera Directa (IED) en los últimos cinco años en 25.000 millones de euros anuales, casi en línea con las cifras de IED anteriores a 2008.
A partir de estas premisas, el informe del CEC apunta que el PIB español mostrará tasas de crecimiento positivo ya en el cuarto trimestre de 2013 y calcula que la mejora de la actividad tendrá efectos positivos en el empleo ya en 2014, gracias también a un impacto favorable de la reforma laboral.