El pasado 24 de junio, la Embajadora Beatriz Larrotcha realizó una visita al portaaviones de la Armada española “Juan Carlos I” en el puerto de Zeebrugge, en el que fue recibida por el Comandante del buque, D. Francisco José Asensi Pérez, y a la que también asistieron autoridades civiles y militares belgas y españolas.
Durante la visita, los responsables del buque explicaron con detalle las principales potencialidades, capacidades y futuras misiones de este portaaviones. La Embajadora se reunió además con la Comunidad Militar española en Bélgica y firmó en el libro de honor del buque.
Para finalizar el acto, se celebró una recepción en la que participaron tanto autoridades españolas como belgas.
La escala del portaaviones “Juan Carlos I” en el puerto de Zeebrugge se produjo de regreso de este buque a España, tras participar en el ejercicio “BALTOPS 19”, una misión que se desarrolló en el mar Báltico entre el 9 y el 21 de junio.
El citado ejercicio de adiestramiento es el más relevante que se realiza en esas aguas y contó con la participación de unidades navales, aéreas y terrestres de 18 países de la OTAN y aliados, siendo la contribución de la Armada Española la más importante, con la participación del portaaviones LHD “Juan Carlos I” y dos Fragatas AEGIS de la clase Álvaro de Bazán.
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Para esta misión, el buque “Juan Carlos I” llevaba embarcados a 900 militares, entre los que se encontraban, además de los 300 miembros de la dotación, una unidad aérea formada por 105 personas, 7 aviones AV8B Harrier y 3 helicópteros SH3D Seaking, un Grupo Naval de Playa compuesto por 30 personas, 4 lanchas de desembarco LCM-1E y una fuerza de desembarco compuesta por 306 infantes de marina y 38 vehículos. El portaaviones “Juan Carlos I” es el sustituto del “Príncipe de Asturias (R-11)” y cumple cuatro perfiles de misión: portaviones, buque anfibio, buque de proyecciones estratégicas y hospital. La construcción del “Juan Carlos I”, buque monocasco construido de acero, se inició en enero del año 2005 en el astillero de Navantia en Ferrol, y fue finalizada cinco años más tarde, realizándose con las más avanzadas técnicas de construcción naval modular.
Junto con el portaaviones “Juan Carlos I” realizó también escala en Zeebrugge la fragata Cristóbal Colón, procedente asimismo del ejercicio “BALTOPS 19”.