La secretaria general de Sanidad y Consumo, Pilar Farjas, ha participado en la Reunión informal de Ministros de Salud de la Unión Europea, que se ha celebrado los días de hoy y de ayer en Atenas. En el encuentro, en el que se han abordado asuntos como la gestión sanitaria en crisis económica y las migraciones y salud pública, Farjas ha puesto de manifiesto los últimos datos de la implantación de la llamada sanidad electrónica o e-Salud en nuestro país.
En concreto, ha asegurado que en los últimos dos años, la implantación de estos sistemas se ha multiplicado, extendiéndose en mayor o menor medida a todas las Comunidades Autónomas. Como resultado, el 70% de las prescripciones médicas que se emiten en nuestro país son ya electrónicas, lo que supone que se han duplicado en los últimos dos años. A la vez, 20 millones de pacientes disponen ya de su historia clínica digital, frente a los 7 millones al inicio de la Legislatura. Además, 7,5 millones de historias clínicas pueden ser ya consultadas por los países participantes como receptores del proyecto epSOS de implantación de la sanidad electrónica en Europa. Se trata de herramientas que permiten “gestionar de una manera más eficaz y más eficiente”, y que están entre las medidas que han permitido hacer sostenible la sanidad en nuestro país, según ha puesto de manifiesto la secretaria general.
Esta apuesta por la e-Salud ha convertido a nuestro país en referencia para otros países de la Unión, y le ha llevado a ser uno de los Estados Miembros que pilotan el proyecto epSOS. Así lo ha reconocido, además, la Comisión Europea, que también ha valorado los resultados conseguidos por la reforma sanitaria en España.
En este sentido, Farjas ha destacado el ahorro, superior a los 3.000 millones de euros en farmacia y el incremento en el consumo de medicamentos genéricos, hasta llegar a un 47%. “Ajustamos el porcentaje de aportación en medicamentos en función del nivel de renta del usuario y suprimimos el copago en los grupos vulnerables, como los desempleados de larga duración”, ha recordado. Asimismo, se ha referido a la revisión de la Cartera de Servicios “de acuerdo a la evidencia científica y dando respuesta a las necesidades sanitarias de la población”.
La secretaria general ha pedido a la Unión Europea que contribuya “al esfuerzo de los estados miembros para sostener y proteger los sistemas sanitarios” facilitando el intercambio de buenas prácticas, proporcionando herramientas para evaluar los sistemas y colocando a los sistemas sanitarios como una prioridad de la Agenda 2020.
Por otra parte, en la sesión celebrada ayer, sobre Migración y Salud Pública, la secretaria general ha señalado que “debemos avanzar en conocer, compartir y, si es posible, acordar las mejores prácticas, protocolos de atención sanitaria en los puntos de entrada y recomendaciones de seguimiento”. También ha invitado “a la reflexión” a la Comisión, sobre la posibilidad de “abordar y consensuar, como una política europea, la asistencia sanitaria básica que los estados de la Unión ofrecemos a las personas que no tienen la residencia regularizada”. Los países del sur, ha dicho, hacen un enorme esfuerzo para recibir, atender y tratar a todas las personas. “Por tanto, las soluciones pasan por compromisos políticos compartidos”, pues la inmigración irregular es un fenómeno que afecta a todos los países de UE.
Farjas ha explicado que España cuenta con la cobertura más completa de la Unión Europea para personas en situación irregular, a quienes se atiende siempre en caso de urgencia hasta el alta médica, en el embarazo, parto y postparto y a los menores de 18 años.
Además, el pasado mes de diciembre, el Consejo Interterritorial del Sistema nacional de Salud alcanzó un acuerdo para atender cualquier situación que suponga un riesgo para la salud pública o sea difícil de controlar, “de cuya prevención, tratamiento y seguimiento se ocupa el Sistema Nacional de Salud, con independencia de la situación de los afectados”.